II CONGRESO INTERNACIONAL DE DERECHO PENAL ECONÓMICO Y DE LA EMPRESA
3 DE MAYO DE 2018

 

II CONGRESO INTERNACIONAL DE DERECHO PENAL ECONÓMICO Y DE LA EMPRESA

3 DE MAYO DE 2018

 

Por Alejandro Zas(*)

 

El 3 de mayo pasado se celebró, en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, el II Congreso de Derecho Penal Económico y de la Empresa. En medio de una crisis jurídico-económica, especialistas en el tema -entre los que se encontraban representantes del Ministerio de Justicia- se reunieron para debatir, fundamentalmente, sobre la recientemente sancionada ley penal empresaria (ver artículo “Menos leyes y más aplicación” publicado por elDial.com, Suplemento de Derecho Económico, Edición del 13/4/2018) que le otorgó a las personas jurídicas capacidad para ser sancionadas penalmente.

 

El debate lo abrió el Subsecretario de Investigaciones Anticorrupción, Ignacio Irigiaray, quien aseguró que el modelo empresarial actual "está agotado" y que no hay otro camino que no sea el de recuperar las instituciones. Respecto de la ley penal empresaria, dijo que al gobierno le hubiera gustado tener una norma más completa, pero que no siempre se sanciona lo que se quiere sino "lo que se puede". Finalmente, mencionó que no puede ser que existan marcas directamente asociadas a negocios "sucios" y que la lucha, esta vez, "es en serio".

 

La vicepresidente de la Unidad de Información Financiera (UIF) María Eugenia Talerico fue más categórica y afirmó que la corrupción deterioró a la sociedad y que se necesita un nuevo pacto social en el que las empresas sean parte de la solución y no del problema. "Nos encontramos ante una oportunidad histórica, hay claras señales de transparencia en el sector público", afirmó. En nombre del Ministro de Justicia Germán Garavano, expuso el Subsecretario de Justicia y Política Criminal, quien fue contundente al manifestar que "para las empresas no puede ser lo mismo cumplir que no cumplir con la ley".

 

El español Miguel Ángel Souto -presidente de la Asociación Iberoamericana de Derecho Penal Económico- fue crítico con la nueva ley sancionada al señalar que se aplica a muy pocos delitos y que entre ellos no se incluyó, por ejemplo, el lavado de activos. Explicó que más allá de la ley, lo que importa es la voluntad de aplicación, pues en España esa norma tiene más de una década y sólo hay cuatro sentencias contra las empresas. También se mostró en desacuerdo con algunas de las penalidades que prevé la ley -como la suspensión o clausura de la empresa- ya que el Estado, lo que debe buscar, es recaudar y no el cierre de las compañías.

 

El representante del Poder Judicial Gustavo Meirovich -Juez en lo Penal Económico-, también se mostró crítico con la nueva normativa. "Tiene que haber una armonía entre el Código Aduanero y la Ley Penal Empresaria", afirmó el magistrado, quien instó al camarista federal Carlos Mahíques -presente en la sala- a que se presente el proyecto del nuevo Código Penal, del cual es uno de los autores.

 

Juan Rodríguez Estévez, del Colegio de Abogados de la CABA, apoyó la sanción de la ley penal empresaria aunque remarcó la importancia de que, para que el sistema de la "autodenuncia"-estructura conocida como compliance en la cual las empresas deben tener un sistema de control propio y, en su caso, autodenunciarse- previsto por dicha norma, funcione, debe haber sanciones para quienes se abstengan de informar los delitos, ya que quien ejerza de compliance debe ser un garante de la información.

 

Por su parte, el Fiscal General ante la Cámara en lo Penal Económico, Gabriel Pérez Barberá, aseguró que para investigar este tipo de ilícitos es fundamental "apartarse de toda ideología política". Además, sostuvo que resulta muy importante para los jueces y fiscales contar con contadores que cooperen con las investigaciones -a lo que adherimos- pues sin la ayuda de especialistas en la materia se torna "imposible" comprender las maniobras fraudulentas de una empresa.

 

En definitiva, más allá de los defectos que el nuevo régimen penal empresario pueda tener, todos los expositores celebraron que, al menos, se debata sobre el asunto; pues coincidieron en que nos encontramos en un momento "de cambio" que puede ser muy positivo.

 

Es por ello que se debe continuar avanzando con el asunto, para que finalmente, las empresas y el Estado dejen de ser enemigos y estén del mismo lado.

 

FORES,

foro de estudios sobre la

administración de justicia.

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